La hora ha llegado.

La hora de las mentiras se acabó, dejad afuera los prejuicios, las primeras impresiones, aquí solo es bienvenida la verdad.

Hace años que empecé a ser el malo de la película, y hace también mucho tiempo que intenté de insistir para cambiar eso. no Me da igual lo que piensen, no me da igual lo que hagan, me dan igual ellos, porque las personas que sé que puedo confiar son pocas, pero son de verdad. ¿Pocas? más bien diría escasas. He ido por la vida sin pensar en las consecuencias, y no he caído en la cuenta de que las consecuencias se vuelven contra ti. Que aquellos a los que una vez fueron de tu confianza lo han dejado de ser. Que realmente solo te tienes a ti en esta vida. Que la gente llega a tu vida y se va, y que solamente puedes confiar en la soledad, ella si que estará contigo acompañándote durante todo el resto de tu vida.
Porque crees que haces una cosa bien y enrealidad solo te perjudicas a ti, porque la  única solución es recluirte en tu habitación, sin nada que perder, sin nadie a quien perder.
Y es que no sé como lo hago pero siempre acabo metido dentro de camisas de once varas, y sin quererlo ni beberlo me veo envuelto en unos líos de los que difícilmente se puede salir.

Lo cierto es que sera uno de las peores cosas que haya escrito pero así es como lo siento, un lío de emociones y sentimientos que se transforman en frases sin sentido que salen atropellándose unas detrás de otras.

También quiero despedirme de una persona muy especial, que conocí gracias a los Blogs y que me dio la triste noticia de que ella también me dejaba, por lo que otra vez esa frase tan conocida por todos los que leéis este blog se metió en mi cabeza:

 People Always Leave

Nadia te echaré mucho de menos.